Resumen:

Este tema debería permitir entender los retos de la migración y la cooperación internacional en la cuenca mediterránea.

Principales conceptos tratados:

  • Proceso de Barcelona
  • Unión por el Mediterráneo
  • Migración
  • Cooperación internacional

Competencias transversales adquiridas:

  • Comunicación oral / escrita en lengua materna / extranjera
  • Gestión de la información

Definición de los conceptos clave:

Migración:

Cualquier movimiento de personas fuera de su lugar de residencia habitual, ya sea dentro de su propio país o a través de una frontera internacional.

Migrante:

Toda persona que deja su país para ir a vivir a otro de manera temporal o permanente

Proceso de Barcelona:

Lanzado por la Conferencia Ministerial Euromediterránea celebrada del 27 al 29 de noviembre de 1995, es un proyecto de cooperación que reúne a miembros de la UE y a doce países terceros del Mediterráneo. Se pretende establecer una asociación euromediterránea para hacer del Mediterráneo un espacio común de paz, estabilidad y prosperidad mediante el fortalecimiento del diálogo político y de la seguridad, así como una asociación económica, financiera, social, cultural y humana.

Cooperación internacional multilateral:

Sistema de relaciones internacionales que se centra en negociaciones, compromisos mutuos y cooperación con el fin de establecer normas comunes.

Gobernanza:

Todas las medidas, normas, toma de decisiones, información y órganos de supervisión que aseguran el funcionamiento y control adecuados de un Estado, institución u organización.

Introducción:

La cuenca mediterránea se ha caracterizado a lo largo de los siglos por ser un área de encuentro e intercambio de grupos humanos. Estos movimientos de población no han sido lineales, sino más o menos importantes dependiendo de la época. Se puede encontrar rastro de ellos ya en época fenicia, cuando gentes de la costa siriopalestina dejaron sus aldeas para establecerse entorno al Mediterráneo en las últimas décadas del siglo IX a. C. (desde la península ibérica hasta el Magreb, obteniendo acceso al Atlántico). Esta movilidad perduró con la civilización griega, ampliamente presente en toda la costa. Platón describió a los griegos del Mediterráneo como «hormigas o ranas alrededor de un estanque» (Phedron, 109).

Estos flujos de población han permitido la difusión de culturas, lenguas y tecnologías y han fomentado la aparición de nuevas tecnologías y procesos productivos.

Más allá de ser una característica histórica, la movilidad entorno a la cuenca mediterránea ha permitido crear vínculos importantes y duraderos entre los países. Estos vínculos, formales o informales, han llevado al establecimiento de organizaciones y estrategias supranacionales para trabajar en temas comunes a la región. Un ejemplo es la Unión por el Mediterráneo (UpM), organización intergubernamental que reúne a 43 países de la cuenca mediterránea, incluidos 28 miembros de la Unión Europea, y cuyo objetivo es promover el diálogo y la cooperación a nivel euromediterráneo.

Estas organizaciones se enfrentan a muchos desafíos debido a las disparidades económicas y sociales que existen en la región, pero también debido a la variedad de sistemas políticos. Sin embargo, su intervención es necesaria para proporcionar respuestas globales a los problemas de la cuenca mediterránea, siendo la vulnerabilidad al cambio climático uno de los principales.

Cuestiones idendificadas en este tema vinculadas al desarrollo sostenible:

¿Cuáles son los impactos de los flujos migratorios en el medio ambiente mediterráneo? ¿Cómo cooperan los países entre sí?

1. El Mediterráneo, una zona de migración

Los flujos migratorios han evolucionado a lo largo de los siglos y actualmente están adoptando muchas formas diferentes. Debe recordarse que el término migración se refiere a “cualquier movimiento de personas que abandonan su lugar de residencia habitual, ya sea dentro del mismo país o a través de una frontera internacional». Puede ser causado por razones económicas y sociales (búsqueda de un mejor nivel de vida, huida de un área de alto riesgo), o por razones climáticas (relacionadas con un cambio repentino o gradual en el medio ambiente debido al cambio climático). Estas migraciones pueden ser internas o externas respecto a un Estado.

Podemos distinguir diferentes zonas migratorias en el área mediterránea:

  • El Mediterráneo occidental - incluyendo el Magreb y Europa
  • Los Balcanes
  • El Mediterráneo oriental - incluyendo el Máshreq y Oriente Próximo

La región ha experimentado sucesivas oleadas migratorias. Durante la colonización europea del siglo XIX, estas fueron en dirección norte-sur.

En el siglo XX, apareció la inmigración sur-norte, caracterizada principalmente por el flujo de trabajadores. Los países europeos que sufrieron las dos guerras mundiales carecían de mano de obra y trataban de atraerla.

Actualmente, el sur del Mediterráneo se caracteriza por una elevada emigración. Su población joven se dirige principalmente a Europa, pero también a los países del Golfo, Estados Unidos y Canadá.

A estos flujos migratorios a largo plazo, también se suman importantes flujos turísticos. De hecho, el área mediterránea es el principal destino turístico del mundo, lo que provoca una fuerte presión antrópica durante el verano. En 2014, recibió 314 millones de visitantes, que representan el 30% del número total de llegadas de turistas internacionales en todo el mundo. Se espera que esta cifra alcance los 500 millones en 2030.

El turismo de masas, que se concentra en el litoral, conduce a la degradación medioambiental, incluida la contaminación marina relacionada con las aguas residuales y los vertederos ilegales. A ello se suma un consumo energético excesivo: el consumo eléctrico se dispara rápidamente debido al elevado uso del aire acondicionado; el aumento de la extracción de agua tiende a provocar el estrés hídrico en el territorio, etc. Otro factor a tener en cuenta es la multiplicación de los medios de transporte que contribuye a aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero en la región. Además, el transporte de bajo coste tiende a atraer a más personas con el riesgo de dañar el ecosistema mediterráneo e incrementar la urbanización de la región. Por lo tanto, el territorio debe afrontar problemas importantes que requieren una intervención conjunta.

2. El diálogo euromediterráneo, un importante instrumento para el desarrollo

El diálogo euromediterráneo se formalizó en 1995 con la implementación del Proceso de Barcelona impulsado para gestionar con eficacia los retos que afectan al territorio mediterráneo. Lanzado en la Conferencia de Barcelona de 27 Estados, este proyecto de cooperación debería conducir a una asociación euromediterránea para hacer de la región un espacio común de paz, estabilidad y prosperidad, que se logrará fortaleciendo el diálogo político internacional acompañado de una asociación económica y financiera, así como social y cultural.

Uno de los objetivos de dicha asociación es abordar los problemas migratorios existentes en el territorio. Esta cooperación también permite una mejor gestión de los problemas económicos y ambientales. El grupo de Estados que la forman trabaja en particular con el Plan Azul, un centro de actividades regionales del Mediterráneo que elabora estudios y situaciones hipotéticas sobre el futuro con el fin de concienciar a los agentes mediterráneos y a los responsables de la toma de decisiones sobre temas medioambientales y de sostenibilidad.

union for te mediterranean

Estos Estados también han elaborado una Estrategia Mediterránea para el Desarrollo Sostenible, primero en 2005 y luego para el periodo 2016-2025. En base a los resultados de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible (Río +20), esta estrategia debería conducir a la aplicación de medidas para proteger el medio ambiente que al mismo tiempo permitan una actividad económica viable.

La cooperación euromediterránea es evidente también en otras áreas como el sector marítimo. Un ejemplo de ello es la creación, en 1949, de la Comisión General de Pesca del Mediterráneo que reúne a 23 países de la región que colaboran para conservar las poblaciones de peces.

Otro ejemplo es el proyecto Medfish, en el que el World Wildlife Found (WWF) y el Marine Stewardship Council (MSC) se han comprometido a analizar conjuntamente las pesquerías mediterráneas.

Los Estados mediterráneos también están representados en organismos como la Conferencia de Regiones Marítimas Periféricas, que ayuda a promover un desarrollo más equilibrado del territorio europeo. Esta pretende incidir en la creación de las condiciones necesarias para la cohesión social, económica y territorial actuando, en particular, sobre las políticas con un fuerte impacto territorial.

Toda esta cooperación tiene como objetivo promover un desarrollo homogéneo de la región a largo plazo. En 2017, los líderes de la Unión Europea aprobaron la Declaración de Malta a raíz de las crisis migratorias europeas, centrándose en medidas para frenar el flujo de inmigración desde Libia a Italia y resto de la UE. Dicha Declaración trata de fortalecer este intercambio euromediterráneo a través de la investigación y la innovación, lo que debería permitir el desarrollo regional a través de la empleabilidad de los jóvenes, la creación de empleo, la educación y el empoderamiento de las mujeres.

Los migrantes, refugiados y personas en busca de asilo tienen derechos que los protegen bajo la ley internacional, sin importar como llegan al país y el propósito de su salida. Tienen los mismos derechos que el resto y además se benefician de una protección especial tal como indican los siguientes documentos:

  • La Declaración Universal de Derechos Humanos, que indica en su artículo 14 que “En caso de persecución, toda persona tiene derecho a buscar asilo, y a disfrutar de él, en cualquier país”.
  • La Convención de la ONU relativa al estado de los refugiados (1951, y el Protocolo de 1967), que prohíbe el regreso de refugiados a su país cuando estén en riesgo de persecución.
  • La Convención Internacional sobre la Protección y Derechos de los Trabajadores y miembros de sus familias (1990).
  • Instrumentos legales regionales relativos a los refugiados, incluyendo La Convención de la organización de la Unidad Africana (1969), La Declaración de Cartagena (1984), El Sistema Europeo Común de Asilo y la Normativa de Dublín.

3. Intervención a través de la educación

La Universidad Euromediterránea de Fez (UEMF) se fundó con el objetivo de formar a los jóvenes residentes sobre temas regionales (energías renovables, el agua, macrodatos).

Paralelamente, se creó el proyecto Méditerranée Nouvelle Chance (MedNC) en 1988. Su objetivo es promover el establecimiento de una red regional de centros de orientación, formación e integración profesional para fomentar la empleabilidad de los jóvenes que han abandonado la escuela antes de graduarse. De este modo, MedNC ha permitido crear planes locales de integración socioprofesional con resultados superiores a las medias nacionales.

Todas estas iniciativas euromediterráneas contribuyen a promover la empleabilidad regional de los jóvenes a la vez que estimulan la innovación en la región.

Integración del tema en el programa escolar:

Edad11121314151617
Lengua Materna / Extranjera / Literatura
Historia
Geografía
Matemáticas
Biología / Geología
Física / Química
Ciencias Sociales / Economía / Derecho
Arte / Música
Tecnología / Informática

Recursos:

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